Odiamos los trenes expresos
Sé que voy tarde para el trabajo cuando el señor de la panadería de las esquina ya ha vendido todos los buñuelos, cuando a la niña practicante del SENA me la encuentro cruzando la calle que esta a la vuelta de la estación, cuando debería encontrármela cruzando los torniquetes. Sé que es practicante del SENA por la sonrisa color violeta que lleva puesta en su rostro y el vestido "elegante" que parece uniforme de técnica en secretariado gerencial de sala de belleza, que la verdad no sé si existe esa técnica, pero con el SENA la que no exista se la inventan y le ponen nombres así de raros. No es que el vestido lleve el logo del SENA, pero los únicos que van felices a trabajar con esa indumentaria son ellos. Lo importante no es eso, lo importante es que la culpa de que llegue tarde a mi trabajo todos los días no es mía por apagar el despertador después de que suene la primera vez, ni de mi mamá por no levantarme, ni mucho menos de ver RedTube la noche anterior. ...