Dejar salir, es ingresar más fácil y rápido



Por: Santiago Cano
@Basto_art

"Dejar salir, es ingresar más fácil y rápido " Debería aplicar, no sólo en la cultura metro, si no también en las relaciones amorosas.

Hace un año atrás Miriam  - La hermana de un amigo- sostenía una relación con un cubano por Internet que conoció vía Facebook. Él residía en estados unidos, y siempre a las 8:00 de la noche - hora colombiana - llamaba a Miriam a la  casa - Me contaba mi amigo- En cada llamada el hombre la descrestaba, ella se la pasaba hablando de Bob, en el desayuno, almuerzo, comida, en su trabajo, con sus amigas como toda una adolescente con sus hormonas alborotadas. No le faltaba si no organizar una empijamada con sus befas de 40 años de edad, que aunque ya estaban casadas, tenían hijos mayores y algunas  divorciadas, se sentían con esa fuerza y mentalidad de niña de quince.

Siempre en las salidas a tomar cerveza con Óscar y rajar de las personas, llegábamos al tema de su hermana. Un día me dijo que ella se iba a casar, que el cubano iba a venir, ella estaba tan emocionada que se le olvidó por completo la ruptura que tuvo un mes antes con Ovidio -El taxista- con el cuál había vivido un año y que no era el padre de sus dos hijos.

Salieron a buscar apartamento en el poblado por que el comunista venía cargado de dinero de la USA, Miriam gastó los pocos ahorros que tenía en vestidos de baño, artículos para la playa y una depilación con hilo porque el cubano la llevaría a Cartagena. 

Como buenos colombianos que somos y arrodillados frente a los extrajeros, por supuesto, el aeropuerto estaba lleno de los Camacho Corredor -La familia de Miriam- esperando al futuro miembro de la familia todos sonreían, pero ¿No sé porqué? No sé qué tanto puede mejorar uno la casta teniendo un cubano en la familia.

Bob llegó y para desilusión de todos no fue lo que esperaba, trajo regalos sí, pero todos descontinuados, a Daniel, hijo mayor de Miriam le trajo un Súper-Nintendo y el niño acostumbrado a jugar con sus controles inalámbricos en su PS4, que se lo había regalado su papá y sin ir a la USA.

El apartamento del poblado lo tuvieron que entregar porque Bob le dijo a Miriam que era mejor estar en la casa de su madre, no salía de allí desde que llego - claro si todo le salió gratis, porque ni mercado compró- Decía Óscar. Y el mar de Cartagena Miriam si lo conoció, pero en televisión mientras pasaban el reinado por los canales nacionales. El comunista vino y se le comió el postre a Miriam y la boda que tanto le hablaba por teléfono le dijo que tenía que aplazarse hasta que el consiguiera más plata. 

Ya ha pasado un año y el cubano no llama, Miriam volvió con Ovidio - El taxista - con el que había terminado un mes antes de conocer al comunista.

Hoy en la estación Aguacatala cuando en el altavoz anunciaron "Dejar salir es ingresar más fácil y rápido " Vi a Miriam que esperaba que todos bajaran del vagón para ella montarse, debería aplicar lo de la cultura metro para su vida (Un clavo no saca otro clavo) debería sanar primero su corazón de las relaciones pasadas, dejar salir un amor para dejar que ingrese otro, antes de que el sardino con el que iba cogida de mano, se le coma el postre y no pague la cuenta como el cubano.

Comentarios

  1. jajajaja Maravilloso Articulo, importante para la salud mental de las personas

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